Dr. Ricardo Asch
Hay tanto causas femeninas (factor femenino) como masculinas (factor masculino). Las más comunes de origen femenino son, además de las alteraciones hormonales, el bloqueo de los tubos de Falopio, la disminución de la reserva ovárica (por edad avanzada, razones quirúrgicas, genéticas, etc.), la disfunción ovárica (síndrome de ovario poliquístico), la endometriosis, entre otras.
El factor masculino se debe a anomalías anatómicas (varicoceles, criptorquidea, ausencia congénita de vas deferens, etc.) y/o funcionales (hormonales, genéticas, etc.), que resultan en una mala cantidad y/o calidad de espermatozoides en el eyaculado. También se debe a causas de origen inmunológico, cromosómico, radiación y/o quimioterapia, entre otras. No es raro que en una misma persona exista más de una causa y que en una pareja, ambos miembros contribuyan a la falta de fertilidad.